¿Por qué tener una mascarilla para niños?

Para que tus hijos disfruten al máximo de sus jornadas de esquí, completa su equipamiento con una mascarilla para niños. Protección esencial tanto para los días soleados como para los nublados.

Cómo elegir una mascarilla para niños

Una mascarilla para niños es a la vez un accesorio y una protección. Protege contra los rayos UV y la luminosidad dejando un campo de visión óptimo. Esencial para el equipamiento de un esquiador, la mascarilla para niños como la mascarilla para adultos debe elegirse según varios criterios.

Hay que tener en cuenta la morfología del esquiador, ya que los mascarillas de los adultos son mucho más grandes que los de los niños. Tenga cuidado con el tamaño de la mascarilla. El mascarilla del niño no debe ser demasiado apretado, su hijo debe sentirse cómodo y poder llevar la mascarilla todo el día. La mascarilla debe colocarse en las sienes sin constreñir demasiado la cara. La mascarillade tamaño adecuado debe rodear el campo de visión sin comprometerlo.

La luz del sol desempeña un papel importante en la elección de una mascarilla para niños. Si sólo esquías en días soleados, debes elegir una mascarilla de esquí de categoría 3 o 4 para una protección óptima contra los rayos UV, más adecuada para la luz. En este caso, el tinte de la pantalla puede desempeñar un papel importante, ya que cuanto más tintada esté la pantalla, mayor será la protección.

Un criterio importante a la hora de comprar una mascarilla para niños es el tratamiento antivaho. Es más probable que los niños quieran quitarse y ponerse la mascarilla que un adulto. Y cuanto más se quite una mascarilla , más se puede formar una capa de niebla. Para contrarrestar este fenómeno, cada vez más mascarillas están equipadas con una doble pantalla, que permite un filtro térmico entre el aire exterior frío y el calor corporal de la cara. Por lo tanto, este filtro minimiza la formación de niebla.

Y para los niños que llevan gafas, ¡no te asustes! Al igual que las mascarillas de esquí para adultos, algunas mascarillas de esquí para niños están diseñadas para ofrecer un volumen extra para acomodar las gafas y los brazos de las gafas. 

Aunque crezcan rápido, una mascarilla se puede conservar durante mucho tiempo. Las correas ajustables permiten cambiar el tamaño del casco sin cambiar la mascarilla (siempre y cuando la mascarilla siga ajustándose a la cara del niño). Y en lo que respecta a los arañazos, debes saber que la mayoría de las pantallas de las mascarillas de esquí tienen un tratamiento antiarañazos. Algunas mascarillas para niños tienen incluso un marco que sobresale en la parte delantera y que limita el contacto de la mascarilla con el suelo o la nieve en caso de caída.

Y si quieres saber más, descubre cómo elegir tu mascarilla según otros criterios.